N. P. Jesús de Medinaceli
Historia de una advocación
Encargada, a mediados del siglo XVII, por los Padres capuchinos de Sevilla para la fortaleza de la Mamora, cuya capellanía ostentaban, la imagen de Jesús Nazareno, junto con la fortaleza y otras imágenes, cayeron de forma ignominiosa en manos del sultán de Mequinez, Muley Ismail, y fue rescatada, después de haber sido objeto de numerosos sacrilegios, por los padres Trinitarios, como exaltación de su actividad redentora. En 1686, como patronos del Convento que había fundado el primer duque de Lerma, Juan Francisco de la Cerda, VIII duque de Medinaceli y su mujer, Catalina Antonio Aragón, dieron autorización para “hazer labrar” sobre terrenos segregados de la huerta del Palacio, “una capilla de la milagrosa imagen de Jesús Nazareno del rescate”. Anexa al crucero en el lado del Evangelio de la Iglesia del Convento, colocando la imagen en su altar mayor.
En esta sección recogemos algunos textos relativos a la rica historia de la imagen, a su inmediata reproducción a partir del prototipo escultórico sevillano, creando una nueva iconografía de Cristo, y a la organización institucional de su culto en torno a la Congregación de esclavos de Jesús Nazareno, nacida al amparo del IX duque de Medinaceli, hoy Archicofradía Primaria de la Real e Ilustre Esclavitud de Ntro. Padre Jesús Nazareno. Todos estos textos se publicaron en un libro titulado Jesús de Medinaceli, Cautivo y Rescatado: Historia y geografía devocional, editado por la Fundación Casa Ducal de Medinaceli con ocasión del IX Congreso nacional de hermandades y cofradías de Medinaceli, celebrado en la Casa de Pilatos de Sevilla en la primavera de 2011.