N. P. Jesús de Medinaceli

Difusión de una advocación

Más de tres siglos después de la llegada a Madrid de la imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno, lo más destacable de ella, no es solo la devoción que el pueblo de Madrid le demuestra cada primer viernes de marzo y cada Semana Santa, sino también su capacidad para seguir extendiendo el culto por toda la península e incluso fuera de ella. Así en la geografía de la difusión de esta advocación, como en la de la organización institucional de su culto en torno a Cofradías y Hermandades, se solapan tres mapas, el de los conventos trinitarios, el de los de capuchinos y el de los señoríos de la Casa de Medinaceli y sus agregadas, sus principales impulsores. De la extensión de su iconografía testimonia el vocabulario cofrade para el que las expresiones “un Medinaceli” o “un Cautivo” han devenido equivalentes. En esta sección puede conocer la extensión geográfica de esta iconografía y de su devoción en España, de acuerdo con un catálogo realizado por Emilio Iglesias Velasco que se publicó en el libro Jesús de Medinaceli, Cautivo y Rescatado: Historia y geografía devocional, editado por la Fundación Casa Ducal de Medinaceli con ocasión del IX Congreso nacional de hermandades y cofradías de Medinaceli, celebrado en la Casa de Pilatos de Sevilla en la primavera de 2011. De dicho catalogo, que recoge 296 imágenes con la iconografía característica de Jesús de Medinaceli, bajo sus diversas denominaciones históricas —196 con el nombre de Medinaceli, 70 llamados Cautivos y 30 Rescatados—, aquí presentamos únicamente los datos esenciales relativos a cada imagen.