Apuntes visuales de la Capilla del Salvador
Descubra en imágenes una de las más importantes obras arquitectónicas del Renacimiento español. Fue erigida a mediados del XVI por Francisco de los Cobos, todopoderoso secretario del emperador Carlos V y su mujer, María de Mendoza, como panteón familiar, con un elaborado programa arquitectónico, ideológico e iconográfico que proclama la idea del triunfo sobre la muerte en un doble sentido: religioso, la esperanza de la resurrección, y laico, la satisfacción del ideal humanista de alcanzar la inmortalidad a través de la Fama.
La fachada
Gracias a la magnífica portada de Diego de Siloé, que tiene como modelo la Puerta del Perdón de Granada, y a la espléndida obra de imaginería que el escultor Esteban Jamete labró para ella, esta fachada se ha convertido en el emblema de la Úbeda renacentista y de su declaración como Patrimonio de la Humanidad.
La planta y su significado simbólico
La planta de esta capilla resuelve de forma ejemplar la articulación de dos espacios diferentes en uso y funciones: un cuerpo longitudinal de una sola nave, espacio de oración de los fieles según el modelo de basílica romana, y una rotonda en su cabecera, símbolo funerario cuyo arquetipo es el Panteón de Roma. [Planta y ortofotos, Antonio Almagro]
La nave
La nave sigue el modelo de la iglesia de predicación que se impuso durante el siglo XV, una nave con tres tramos y capillas entre los contrafuertes que soportan un entablamento que sirve «de anden por donde se andará por lo alto de toda la capilla mayor […] e asy mesmo podrá esto servir para musyca de organos o de menestriles altos«.
Las portadas laterales
Ambas portadas presentan una estructura tópica de arco de triunfo y tienen contenidos iconográficos dialécticamente complementarios. De entre ellas, destaca la portada meridional, tanto desde el punto de vista arquitectónico, por carecer de precedentes, como iconográfico, por el carácter inédito del discurso judeoconverso que alberga.
La reja del altar mayor
Situada bajo el gran arco toral, es obra realizada en Toledo por el arquitecto, escultor y rejero Francisco de Villalpando, autor de la mejor rejería del Renacimiento español. Concluida en 1555 está rematada por una cruz, en al centro, flanqueada por las armas de los fundadores, Francisco de los Cobos y María de Mendoza, en los laterales.
La capilla mayor
De planta circular, está organizada mediante tres grandes arcos labrados sobre el muro cilíndrico, conocidos como «en torre cavada», enmarcados por medias columnas corintias, sobre las que descansa un entablamento, que circunda y articula todo el templo, y cubierta por una media naranja de casetones cuya referencia evidente es el Panteón de Roma.
El retablo de la Transfiguración
En correspondencia con la fachada principal, el tema de este retablo del Altar Mayor es la Transfiguración de Cristo en el Monte Tabor, obra encargada a Alonso Berruguete, en 1559, por María de Mendoza. Sus figuras son de tamaño colosal y compleja composición, que persigue acentuar el movimiento.
Portada de la Sacristía
Esta “puerta en esquina y rincón”, como la denomina Alonso de Vandelvira, es considerada como un modelo del virtuosismo técnico alcanzado en el renacimiento español por lo que hoy llamamos estereotomía y en la época arte del corte de la piedra, o arte de montea, técnica que exigía una sólida formación en geometría y mecánica.
La sacristía
La singularidad de esta sacristía radica, por una parte, en la magnífica forma en que Vandelvira cubre este espacio tripartito mediante tres espléndidas bóvedas vaídas y, por otra, en que, renunciando a la tradición renacentista española, eliminó el orden columnario y lo sustituyó por un orden vertical de estatuaria monumental.
El órgano dieciochesco
Este órgano, obra de Francisco Javier Fernández, data de 1795 y está ubicado en el mismo balconcillo que el antiguo renacentista. El órgano era la pieza central de una gran capilla musical. Hoy, la música sigue siendo parte central de la liturgia de la capilla, con un coro de niños seises dirigidos por una maestra y acompañados por un organista.