Pedro Salazar y Mendoza, administrador del Hospital de Tavera, en su obra Chronico de el Cardenal don Iuan Tauera, publicada en Toledo en 1603, dice sobre el Cardenal que : «mostró también su mucha modestia en que no se consintió retratar, si bien lo procuraron muchos valientes pintores y escultores, particularmente Alonso de Berruguete, que fue de los más celebrados de aquel tiempo. El retrato que se puso en el cabildo de su iglesia, y otros que hay en el hospital, se hicieron después que murió, por orden o mano del mesmo Berruguete». En este retrato, pintado sobre plancha de mármol, aparece el cardenal tocado con un bonete púrpura, vestido con un roquete blanco y con los párpados cerrados por estar leyendo con gran recogimiento un libro, presumiblemente, por su formato, un breviario, que apoya sobre su capelo cardenalicio. La obra ha sido tradicionalmente atribuida a Alonso de Berruguete, atribución confirmada por el mayor experto de su obra, Manuel Arias (2011) quien afirma que “la evidencia del estudio formal permite reafirmar la paternidad y restituirlo a su catálogo”, al tiempo que, por el estilo, lo vincula al cromatismo y la rapidez de ejecución que manifiestan las pinturas de su retablo de los Mazuelas en el convento de santa Úrsula de Toledo y, por el soporte, lo pone en relación con el de alabastro que, uno de los integrantes de su círculo toledano, el canónigo fabriquero de Toledo, López de Ayala, exigía para el retrato de Maria de Mendoza como garantía de perdurabilidad.
TÉCNICA
Óleo
SOPORTE
Piedra - Mármol
MATERIA
Mármol
DIMENSIONES
Alto: 80.50cm; Ancho: 51.00 cm
LOCALIZACIÓN
Hospital de Tavera