Retrato de los hijos de Ambrosio Spinola, I marqués de los Balbases ante el puerto de Génova

Anónimo
1606

En el bastidor de este lienzo figura una etiqueta con el título “Retrato de los infantes de la Cerda”,  identificación  que se corresponde con el inventario realizado en 1877 para la testamentaría del XV duque de Medinaceli, en el que este cuadro aparece, bajo el número 245, descrito como “Los infantes D. Alonso y D. Fernando de la Cerda, hijos de D. Fernando, primogénito de Alfonso décimo el sabio, y de la mujer de aquel, Doña Blanca, hija de S. Luis. Están apoyados en una balaustrada que da vista al mar: hay un perro entre las dos figuras”. En un inventario anterior, realizado en 1756, ya se había perdido la memoria de los retratados, ya que bajo el asiento número 170, aparece descrito como “Otra pintura de dos manzebos de la casa de la Zerda con vista al mar y puerto de Santa María de dos varas en cuadro marco negro y dorado”, identificación con niños del linaje de la Cerda que sorprende, pues  en el año de dicho inventario aún vivía la persona que debió transmitir esta obra a la  colección Medinaceli, Jerónima Spinola de la Cerda, viuda desde 1739 del X duque, pero fallecida en 1757.

El cuadro esta datado en 1606 en una inscripción pintada a ambos extremos del pasamanos de la balaustrada: a la izquierda, “ÆTATIS SUAE 11/ Ä€. 1606”, y a la derecha, «ÆTATIS SUAE 10/ Ä€. 160?”. El fondo del cuadro, por pinturas y grabados antiguos, se corresponde con el puerto de Génova, cuyo elemento más destacado, la “Lanterna”, que aparece a la derecha, fue construida en 1543. La fecha y el puerto nos permiten identificar con certeza a los retratados con Felipe y Agostino Spinola, hijos de Ambrosio Spinola, futuro I duque de Sesto y I marqués de los Balbases. Posiblemente el retrato se realizó como un recuerdo antes de su partida de Génova, pues un años después, en 1607, llamados por su padre, abandonaron la ciudad ligur para ser introducidos en la corte como meninos de la reina Margarita de Austria. El primero, Felipe,  nacido el 17 de julio de 1594, por lo que en 1606 podía tener 11 años, siguió la carrera militar de su padre, formó parte del Consejo de Estado y presidió el de Flandes, mientras que el segundo, Agostino, nacido en 1597, emprendió la eclesiástica llegando a recibir el capelo cardenalicio y a ocupar la silla arzobispal de Sevilla, donde murió en la peste de 1649.

Se ha pretendido atribuir a Juan Pantoja de la Cruz, atribución difícil de asumir, tanto por razones de calidad y estilo, como porque, en 1606, se sabe con certeza que el pintor de cámara estaba en Madrid pintando a los reyes Felipe III y Margarita de Austria para el I duque de Lerma, retratos que acabaron también en la colección Medinaceli y que, en la ya mencionada testamentaría del XV duque, correspondieron, como este lienzo recién adquirido, a su hijo Carlos Fernández de Córdoba Pérez de Barradas, II duque de Tarifa. Quizás en esta casualidad se haya fundado, en parte, la atribución a Pantoja, presumiendo que habrían tenido el mismo comitente e historia material, pero ya correctamente identificados, habrá que investigar entre los pintores genoveses de la época para encontrar una autoría más plausible. Los dos mencionados retratos de los reyes los legó su viuda, María de los Ángeles Medina-Garvey,en 1934, al museo del Prado donde permanecen , mientras que transmitió otros muchos a sus sobrinos. Este, en concreto, correspondió al conde de Mejorada, cuyos herederos lo vendieron y finalmente ha acabado en Subastas Ansorena donde la Fundación lo ha recuperado. 

TÉCNICA

Óleo

SOPORTE

Lienzo

DIMENSIONES

Alto: 178.50cm; Ancho: 151.50 cm

LOCALIZACIÓN

Casa de Pilatos

INSCRIPCIÓN

Sobre la balaustrada: a la izquierda “ÆTATIS SUAE 11/ Ā. 1606”; a la derecha "ÆTATIS SUAE 10/ Ā. 160?”