Cabeza de una escultura, labrada en mármol blanco de grano grueso, en la que es característica la labor de incisión en los ojos, cejas y párpados, así como su cabello, dividido en dos con grandes ondas y recogido en un moño bajo en la parte posterior. Este tipo peinado, presente también, con mayor definición y sofisticación, en el retrato de Faustina minor de esta colección, es típico de la dinastía Antonina.